KRUZ VENENO: EL PODER DE LA COMEDIA Y EL ARTE DRAG / Juan Pablo Acosta
En Atenas, en el festival anual de drama celebrado en el 426 a. C, una obra cómica titulada Los Babilonios escrita por un joven poeta llamado Aristófanes, fue premiada con el primer lugar. Pero la descripción que se hacía de Atenas durante la guerra del Peloponeso fue tan controversial que, tiempo después, un político llamado Cleón entabló una demanda contra el escritor. Dos años después, Aristófanes contraatacó con una nueva obra llamada Los caballeros, donde Cleón se representaba como un humilde vendedor de salchichas.
Fue el mismo Aristófanes quien ideó a la primera heroína de la comedia: Lisístrata. (de lýô, "soltar", "disolver" y stratós, "ejército": la que licencia, suelta o elimina el ejército). Aunque la historia tenía protagonistas femeninas, eran varones quienes representaban el papel de una mujer. Hasta hoy, Lisístrata es considerada como un símbolo del poder femenino.
No es vestirnos de mujer; es exacerbar la feminidad, comenta Pablo Gallegos, conocido como Kruz Veneno. Lleva un vestido asimétrico color morado brillante, una pulsera plateada, mallas de rejilla, botas stiletto, una melena que hace juego con el vestido y maquillaje dramático con un gran contouring. Fuera la luna está en cuarto creciente y dentro, en el escenario del Teatro Victoria, Kruz celebra sus 26 años de trayectoria en el mundo drag:
Everybody line up
The show is about to start
You have to show a look, have a look or give a look.
Faces, beautiful
No one ugly allowed (…)
Es sábado por la noche: las luces se encienden, el aire agitado por los ventiladores ondula el cabello de las artistas, el humo permite pintar colores en el escenario y Kruz aparece junto a varias de sus hijas, quienes al ritmo de fashionista y con un dorado resplandeciente se presentan como estrellas nacientes en el mundo drag: Angelina Queen, Marilyn Drag, Lindura, Karl Angel, Sofía Brow, Aylin Fox y Nicole Lombardie. La noche empieza a brillar.
Veintiocho años atrás la situación era muy distinta. Antes de convertirse en Kruz, Pablo era un muchacho proveniente de una familia conservadora, encerrado en una cápsula, como él mismo menciona, pero aficionado al arte: el patinaje, la danza, la música. En ese entonces, la FEDAEPS (Fundación Ecuatoriana de Acción y Educación para la Promoción de la Salud) organizaba algunos talleres de inclusión de la diversidad sexual, dentro de los cuales surgió uno de coreografía, inspirado en la película Las aventuras de Priscilla, reina del desierto, film australiano de 1994 que narra el viaje de dos hombres gays y una mujer transexual para hacer una actuación como drag queens en la sala de fiestas de un hotel.
El taller, dictado en 1996 por Patricio Bravomalo y Abelardo Araya, trataba sobre las técnicas gestuales, corporales y actorales para el drag. Sin embargo, luego de algunos meses, la lucha para lograr la despenalización de la homosexualidad en el Ecuador (que finalmente ocurrió en el 97) estaba en auge e hizo que el proceso se detuviese. Un año después, Pablo fue convocado por un empresario suizo para participar como drag queen en la inauguración de un bar. Con el tiempo fueron muy reconocidos en lugares de ambiente como el Bar Matrioshka y El Hueco. Salíamos de a poco, pero fuimos bien guiados e impulsados a ser muy protestarios en la escena, cuenta.
Si a la VIHDA, no al estigma.
Lucha con solidaridad. El VIH no discrimina.
El drag no es un show, es comunicación, nos sirve para decir algo a través de este personaje cómico y exacerbado, comenta Kruz, mientras se pueden ver en el escenario carteles con mensajes dirigidos al público y a la sociedad. Los asistentes al Teatro Victoria cantan, filman con sus celulares, ríen, pero a su vez reflexionan. La relación del drag con la comedia y de esta última con la vida política, especialmente con los problemas más importantes de la sociedad, es continua, inmediata y permanente.
Hubo personas que nos miraban con rabia, nos insultaban, a mí me llegaron a escupir en la cara, afirma Pablo. Sin embargo, también existimos, estamos aquí y tenemos los mismos derechos. Sentíamos un cierto rechazo, pero no provenía del asco, sino de la idea de no saber qué éramos y, por ende, tenernos miedo. Era diferente porque ahora nosotros teníamos el poder.
Amor y lujo
Cuerpos de gloria
Grandes historias
¡Queremos más, queremos más!
La noche por la celebración de los 26 años de trayectoria de Kruz continúa. El teatro es un espacio de poder y las luces, los vestuarios, la música y el perfomance dirigen la atención hacia las artistas, que se intercalan con las intervenciones cómicas de Kruz Veneno. La comicidad no es hacer payasadas, aclara al público, es soltar un mensaje realista y a veces cruel en que somos una especie de bufón medieval y el público es el rey, estamos atados a la comedia.
Jorge Luis Borges, en su poema El gólem, escribe:
Si (como afirma el griego en el Cratilo)
el nombre es arquetipo de la cosa
en las letras de 'rosa' está la rosa
y todo el Nilo en la palabra 'Nilo'
Es así que, para que algo exista debe ser nombrado y es ese nombre el que contiene la escencia de lo proclamado. Kruz Veneno nació en primera instancia de una amiga de Pablo con el apellido Kruskaya, muy llamativo para la época. El alter-ego se expandió después a: Kruskaya Dominique Buchelli Vandenberg y finalmente, por accidente durante una presentación en un bar y por recomendación de un chico del lugar, sorprendido por su humor negro, se condensó en Kruz Veneno. Cambiar tu nombre es dar vida a un ser que reside dentro de ti mismo y yo le hice nacer como yo quería, asegura. Comencé a sacar todo lo que no podía como Pablo, mi lado poderoso, fuerte, todo lo contrario a lo que yo era, porque sufrí de bullying toda una vida por ser femenino. Hubo una época en la que Kruz me comió vivo, Pablo ya no existía. Fue muy fuerte. Al inicio mi proceso fue más protestario, desde una lucha personal. Pero ahora con esa expresión femenina me perdoné, me acepté y me reconcilié conmigo mismo.
¿Sabes lo que es amor? Es un deseo.
En partes terrenal y en partes santo.
Lo que yo sé sentir, cuando te miro.
Lo que no sé expresar, cuando te canto.
Uno de los instantes más emotivos de la celebración es cuando una de las hijas de Kruz, Diamond Rachel, presente hasta ese momento como parte del público, anuncia que hará una presentación en honor a su madre drag. El popular pasillo Amor dolor se funde con Deja que salga la luna mientras Diamond entrega un ramo de flores y, con un sombrero de mariachi, una capa anaranjada y un gran vibrato dedica el tema. Mi madre drag que me ayudó a salir de un hueco donde estaba, de una depresión muy grande, y me enseñó el bonito arte de ser drag (…), confiesa
Luego de veinteséis años, las hijas que han aprendido el arte drag junto a Kruz Veneno son innumerables. Fue una exigencia de los demás, no fue mi plan comenzar a enseñar. En el 2007 hice un concurso llamado Queen of Queens, a partir de ahí comienzan a salir buenos talentos. Sin embargo, también asegura que muchos lo toman como un hobby, con banalidad, sin valorar el hecho de que encarnan un personaje fuerte y eso otorga el poder de decir y enseñar algo, lo cual muchas veces no se cumple. Ahora siento la necesidad de enseñar lo que sé desde el por qué y el para qué y no desde el ego. Pablo cuestiona si el objetivo del drag es recibir los aplausos, o si debe existir un propósito altruista. Eso es lo que estoy tratando de transmitir, por qué te vistes, para qué te vistes; si es muy personal, revolcándote en el piso mostrándolo absolutamente todo, es mejor seguir en el mundo de las discotecas (…). Hagamos cosas buenas, respetémonos, demos un buen mensaje a la sociedad desde la comedia, enfatiza.
De esta forma, tan importante es el arte drag en la sociedad que el trabajo de Kruz incluso ha permitido salvar vidas o ayudar a personas a sobrellevar la depresión, tal es el caso de una chica en la obra Katrinas. A través de la interacción con la gente descubrí que una niña no quería vivir, en medio de todo le mundo dijo: “a mí no me importa la vida”. ¿Te gustaría estar de este lado de la muerte? Le respondí, y comenzó a soltarse… Muchos problemas se pudieron resolver gracias al teatro. Ahora ella está muy bien y asiste a nuestras funciones. No solamente aportamos a la comunidad gay, sino a un sinnúmero de personas. Tenemos una obra llamada Una novela llamada realidad, en la que las tres personajes, un ama de casa, una niña nice y una prostituta, están en el mismo sitio por el riesgo de haber podido adquirir VIH.
We are family,
I got all my sisters with me.
We are family,
get up everybody and sing.
La noche en el teatro llega a la canción final, Kruz Veneno y sus siete hijas drag se presentan con trajes dorados, pero no son simplemente hombres con atuendo de mujer lo que se ve en el escenario; son estrellas; son hermanas; son diosas; como si en el teatro de pronto estuviesen presentes: Amonet, Bastet, Anuket, Saosis, Perséfone, Démeter, Asushunamir y Avilix (…) y proponen un homenaje a todas las drag queens; a las que existieron y a las que vendrán. Así pues, al igual que en Lisístrata, tenemos un ejemplo de utopía cómica, del mundo al revés. Frente a los varones, las mujeres, más sensatas y prudentes que ellos, son quienes finalmente se deciden a establecer la paz
Más de veinte siglos atrás, la comedia había surgido para defender la libertad de expresión y reconocer a los héroes comunes. El teatro hacía pensar, mientras provocaba la risa del público. Al parecer la situación no ha cambiado mucho y la respuesta que Aristófanes le dio a Cleón en el 425 a. C todavía resuena hasta hoy: “soy un comediante y por eso hablaré de justicia, sin importar cuán duro suene a tus oídos (…)”
Ficha técnica:
Artistas: Kruz Veneno, Angelina Queen, Marilyn Drag, Lindura, Karl Angel, Sofía Brow, Aylin Fox, Nicole Lombardie, Diamond Rachel.
Iluminación: Gonzalo Núñez Caviedes.
Sonido: Pamela Rentería.
Juan Pablo Acosta: actor, director escénico, cantante, pintor y dramaturgo. Director académico y profesor de actuación en la Escuela Integral de Formación de Artistas-EIFA y Director Artístico en el Teatro Victoria.