José Deux y Edwin Hugo Mena, ambos jóvenes actores y dramaturgos, son los autores de las obras Goteras y Memorias de Cafeína, respectivamente, publicadas en la colección Dramaturgia de la Unidad de Publicaciones y Editorial del Núcleo Pichincha de la Casa de la cultura Ecuatoriana.

Hay que destacar la contundencia de los textos, que ya nos ubican en los  nuevos momentos de la escritura teatral del país. No se trata de simples ‘revelaciones’, si no de entenderlos como parte de una ‘alquimia’ que se define como incontable, en término de la exaltación del lenguaje, los temas, el trato peculiar de los personajes que se interrogan sobre su propia condición de seres sospechosos, descifrando las claves de la interpretación.

En la obra Goteras, el juego iniciático de José Deux está centrado en los personajes Héctor, Beatriz y Adrián (encerrados en una habitación con goteras), en sus divagaciones y enfrentamientos. El telón de fondo son algunos acontecimientos políticos, que giran alrededor de ciertas asociaciones que se presentan como un collage, en el sentido de que se muestran las contradicciones sociales, como definitivas polarizaciones.

Y las contradicciones están tanto afuera como adentro de la habitación: por ello, el retumbo de las gotas que caen sobre las cubetas es la constante para que Beatriz, Héctor y Adrián, no cesen de repetir el mismo axioma sobre las posibilidades de cambiar la situación del país. Crean un misterio sobre las derrotas. O la posibilidad de un fracaso. Ahí es cuando Héctor habla sobre las palabras, peligrosas como “balas arbitrarias que buscan destruir el instinto”. Referencias directas a eventos actuales, como imágenes y bytes de los discursos del poder, anteriores, recientes, próximos. Después están el miedo que agujerea y el ruido final de las tres goteras que ilustra otra vez la derrota.

Edwin Hugo Mena concibe un texto sobre el sueño. La paradoja es que los sueños son muy cercanos al silencio. Por lo tanto, es necesario combinar  lo uno con lo otro. El cambio es sublimado por la descensión de Débora y David a la ‘realidad’, como si se tratara de una transmutación sobre las falsas creencias del amor, entre Débora, David, Marcelo y Grecia, fantaseados como propios. Se juega con un criterio de semejanza, dudosa por irrelevante. La irreverencia es el signo de la evidencia o de los inicios. Débora y David hacen conjeturas que no necesitan puntos de verificación. Entre los dos prima solo lo razonable respecto de aquellas conjeturas que se bifurcan como si se tratara de emblemas de una despedida final, repetida por los dos casi amantes: “Aunque oculta, nuestra historia queda escrita en nuestros recuerdos y sonreiremos al recordarlos, sin que nadie sepa que fuimos inhumanamente humanos”. SR

JOSÉ DEUX

“Mi formación es como master en Guion, especializado en Dirección de Cine por la Escuela Internacional de Cine y Televisión, de San Antonio de los Baños, Cuba. He sido escritor y director de los siguientes cortos de ficción y documental: Moscas, Descomposición, Pasado. Al momento desarrollo mis óperas primas de ficción titulada Luxarium, y de documental, Mi enemigo es mi cuerpo. He escrito las obras de teatro Revólver, Lipstic y Goteras. He conseguido galardones por trabajos cinematográficos que han sido seleccionados en distintos festivales: FICQ (mejor cortometraje nacional); Festival Sin Censura, Lima, Perú; EDOCS; Festival de Cine Independiente de Montreal; MIFF, Melbourne (galardón a la Mejor actriz de sesión); Docu filme Festival, León, Guanajuato, México. Soy docente y asesor de guion”.

EDWIN HUGO MENA

“Curioso de nacimiento, inquieto por vocación: así me define mi madre cuando recuerda todas las travesuras de mi niñez. Muy joven, sobre el crepúsculo, escribí mis primeros versos mal logrados con algunas faltas de ortografía. ¡Hermosa barbaridad adolescente! En la misma época empecé a buscar incansable todas las posibilidades guardadas en los libros.

La escritura de textos significa para mí la mejor forma de expresar y liberarme de todos mis miedos y deseos, algo catártico. Cada cierto tiempo escribía ficción, tomando cuanto podía de la vida para hacerla lo más real posible. Uno de los resultados: Memorias de cafeína, escrita en 2019. Nací en quito un viernes 26 de agosto, cuando mis padres vivían en el tradicional barrio de San Roque. Realicé mis estudios primarios en la Escuela Municipal sucre, lugar donde me enamoré del teatro a los seis años. Los directores de la escuela tenían la costumbre de organizar pequeñas representaciones teatrales con la participación estudiantil. Quedé tan fascinado con lo visto en el escenario aquella primera vez, que pronto sería partícipe de esa magia donde todo puede ser e intervine en algunas obras infantiles.

Como estudiante de bachillerato en el Colegio Nacional Juan Pío Montúfar, empecé a escribir poesía y radioteatro junto a compañeros con la misma afición. Después de terminar mis estudios de ingeniería civil, ingresé a la Facultad de Artes de la Universidad Central del Ecuador, a estudiar en la Escuela de Teatro.

Si bien mi intención fue descubrir el teatro por dentro para escribir mejor, en su lugar encontré el amor. Llegaron después a mi vida el matrimonio y dos hermosos hijos (mis pequeños tesoros). Este acto cambio el rumbo de mi vida en dirección opuesta a mi mayor sueño. Mi necesidad de expresarme supera cualquier etapa mía de estancamiento permitiéndome, en los últimos años, escribir de forma continua, tiempo en el cual he acumulado sobre mi escritorio algunos textos, la mayoría inéditos, que en un futuro cercano pondré a su consideración para su gusto o disgusto.

Goteras / Memorias de cafeína

José Deux – Edwin Mena

Primera Edición / 2023

Diseño de portada: Isaac  Gómez Toaza

Impresión: Dirección de Publicaciones y Editorial

Edición y corrección: Cristina Morales Ruiz

Diseño y diagramación: Tania Dávila L.