El Apuntador

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El juglar

Lugar de nacimiento: Guayaquil, Ecuador

Correo electrónico: tallerteatroeljuglar@gmail.com

Trayectoria:

EL JUGLAR es un grupo de teatro de la ciudad de Guayaquil, Ecuador, el cual desde sus inicios estuvo a cargo del director Ernesto Suárez. El grupo está conformado por los actores: Oswaldo Segura, Roosevelt Valencia, Medardo Goya, Luis Aguirre, Henry Layana, Isidro Murillo, Raúl Pintos, Augusto Enríquez, Geovanni Dávila, Mauro Guerrero, Marcelo Gálvez, y las actrices Sandra Pareja, Cecilia Caicedo, Carmen Espinoza, Elvira Carbo, Miriam Murillo y Azucena Mora.

En el año de 1977, cuando el director de teatro argentino Ernesto Suárez, llegó a Ecuador luego de su exilio de la dictadura en Argentina, invitado por Ottón Muñoz, Director de Cultura de la M.I.Municipalidad de Guayaquil a dar un Curso en la Biblioteca Municipal en el que se inscribieron más de 90 personas y debió dar un segundo curso, con igual cantidad de inscriptos. Finalizados estos cursos los asistentes le solicitaron conformarse como grupo y empezaron a ensayar en diferentes lugares que les iban prestando. En las escalinatas de la Casa de la Cultura del Guayas decidieron llamarse TALLER DE TEATRO EL JUGLAR, en honor al mítico personaje medieval y dada la situación en que se encontraban, en la calle.

Desde sus inicios, el grupo recorrió las calles y parques de la urbe, hasta hacer una campaña “UNA BOTELLA VACÍA PARA UN TEATRO LLENO" para recolectar fondos y alquilar un espacio propio, que finalmente sería en la calle Boyacá 1616 y Clemente Ballén, en un 2o. piso alto.

Aquí se iban construyendo en actores, carpinteros, plomeros, pintores, etc. mientras también iban construyendo sus sueños... la sala propia que inauguran un Viernes 22 de Junio de 1979. 

Al principio eran más los actores en el escenario que el público en la platea hasta que esta situación se revierte gracias al "hallazgo" de la obra GUAYAQUIL SUPERSTAR. En un descanso del ensayo de la obra "Arlequín, servidor de dos patrones" un par de compañeros parodian a unos vecinos del barrio que fueron a USA una semana y regresaron "hablando inglés". Este fue el disparador de lo que sería ese gran éxito que nos ha acompañado por más de 40 años y de la línea de trabajo que abordaría de ahí en más EL JUGLAR.