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Abril y su sombra/Genoveva Mora Toral

Abril y su sombra . Alejandra Corman. Foto Silvia Echevarria El Apuntador

Abril y su sombra/Genoveva Mora Toral

Esta obra propuesta por Alejandra Corman se sostiene en una temática completamente actual en tiempos de encierro, depresión y suicidios, sin duda alguna, nos conminan a profundas reflexiones, a cuestionamientos acerca de nuestras sensibilidades, fortalezas y fragilidades; ¿será que en este siglo veintiuno los humanos tenemos menos resistencia, o menos creencias? No importan de qué tipo, no hablo de religión ¿a qué, o, de qué nos sostenemos hoy ante la tragedia? Qué sostuvo a tantos y tantos seres humanos en situaciones límite a lo largo de la historia, como la de aquellos enviados a Siberia en tiempos de Stalin, o a los campos de exterminio Nazi, donde un número importante de víctimas optaron por el suicidio; decisiones desesperadas que fueron incluso causa de mofa por parte de los S.S. según relata en un espeluznante artículo Álvaro Corazón Rural [1]. Quitarse la vida es una disposición personal y ha sido una puerta de escape en todos los tiempos, sin embargo, no la vemos como algo normalizado, porque el instinto de vivir es innato al ser humano.

Abril y su sombra . Alejandra Corman. Foto Silvia Echevarria El Apuntador

Cuando nos enfrentamos a obras con temas profundos, la tendencia natural es hablar sobre ellos; pero hoy, aquí, me atañe el teatro, el modo cómo se lo asume, cómo el tema se vuelve dramaturgia escénica; cómo el personaje se hace cargo del texto, es decir, cómo lo representa y conjuga los códigos teatrales para tejerlos en texto espectacular.

Admitámoslo o no, frente a una obra, hay una primera reacción, el famoso ‘gusto’, eso es lo inmediato, sí, pero al mismo tiempo nos lleva a pensar detenidamente porqué sí o por qué no me gustó.

Me gustó la actuación (asumiendo que se debe hablar de lectura de obra, no de gustos), la presencia de Conrado en la escena; de hecho, ella es una actriz con experiencia en cine, TV. Sin embargo, todo el tiempo estuve esperando algo más, no me refiero a la historia, sino a lo que el mismo espacio escénico y personaje provoca en xl espectadxr. Empecemos por la escenografía, estéticamente muy lograda, limpia; paredes, y hasta la cama repletas de textos impecables, escritos con cuidadosa caligrafía, tipos distintos de letras; que bien pueden pensarse nacidos de la lucidez de una maniática, o de alguien simplemente hábil y cuidadoso; no obstante,  en la escena adquieren otra connotación; si el personaje, como sucede, va transformándose, en este caso, no de manera lineal porque tiene idas y venidas desde la depresión y el deseo de morir, hacia la claridad de vivir; en ese tránsito Abril se acerca a sus listas de obsesiones escritas, las toca pero no las interviene, eso me da dos lecturas: no las borronea o las tacha porque no entra a fondo en su depresión, o es un desliz escénico en cuanto a dejarlas solamente como escenario , aunque eso produzca cierta liviandad en las acciones.

Abril y su sombra . Alejandra Corman. Foto Silvia Echevarria El Apuntador

En cuanto al personaje, también me interpela, Abril es ella y es su voz en off, y es ‘otra’, la que viste un hoodie, ¿un alter ego de Abril?, la que comenta con alguien más: “por fin Abril se durmió, es hora de preguntase ¿vivimos o morimos?... habla sobre las crisis de la potencial suicida, también es la voz que aconseja. En resumen, la actriz tiene a su cargo un intenso trabajo de voz, y es ahí donde faltan quiebres más definidos, intensidad, cambios, porque de lo contrario se torna lineal, a pesar de que el texto la sostiene, y, precisamente, hablando del texto tiene unos momentos de humor negro que bien podrían ser mucho más explotados, dramatúrgicamente.  

Abril y su sombra

En cuanto a los espacial, es un lugar amplio donde el personaje se maneja con espontaneidad, lo ocupa plenamente; mas, en los momentos oscuros de Abril podría adquirir contundencia y no optar solamente por la cama como el lugar donde parecería que va a suceder el colapso.

En resumen, y ese es el trabajo de filigrana en el teatro, es imperativo tejer todos los elementos de manera que se tornen una sola pieza, sea espacio donde no solamente acontezcan situaciones, sino que se convierta en actante, se construya una atmósfera que afecte y esté a la par con la energía del personaje (que sí ocurre), que se expanda, abarque el espacio y lo subvierta en atmósfera.

Abril y su sombra es un importante esfuerzo y al mismo tiempo un riesgo, a pesar de que hay una co-directora, optar, siendo la autora, estar dentro de la obra como personaje y dirigirse, reclama una especie de desprendimiento de lo creado, de esos hijxs que son los textos, para lograr una cierta objetividad, es un trabajo complejo, un reto doble al llegar a escena.

Ficha técnica

Escrita por Alejandra Corman  

Dirigida por Alejandra Corman  y co-dirigida por @gabrielaruizactriz

Actuación de Alejandra Corman     

Producida por @camila.mancero

Estreno el 23 de febrero

Asociacion Humboldt / Vancouver y Polonia

Quito, Ecuador [1] https://www.jotdown.es/2018/10/suicidios-en-el-totalitarismo/

Cantina/ Genoveva Mora Toral

Cantina/ Genoveva Mora Toral

La place de la danse/ Genoveva Mora Toral

La place de la danse/ Genoveva Mora Toral