La voluntad de resistencia/Santiago Ribadeneira Aguirre
La revolución –repite Marji con insistencia infantil– no puede depender solo de la voluntad individual, –o de la historia– cuando el devenir está condicionado por el poder. Marji, a sus diez años, seguramente quiere transmitir una idea de revolución implicada (la idea del cambio) que se encarne en la familia, en la escuela, en la comunidad. Es además el deber de la memoria que no puede romper con el pasado. En sus juegos infantiles diarios reproduce el mundo que ella, los otros niños y jóvenes iraníes aspiran: sin guerras, sin violencia, persecuciones y asesinatos, que pueda apoyarse en posibilidades de vida reales.
Marji Valiente es una obra pensada, construida y actuada por Ana Paula Peña y Ana Nájera Erráez de Enredo Teatro, con la asistencia en la dirección de Claudia Roggiero. Inspirada en la novela gráfica Persépolis de Marjane Satrapi y en los recientes sucesos del año pasado, en Irán, con la muerte de Mahsa Amini a manos de la ‘policía de la moral’, que puso en debate el uso obligatorio del velo islámico (hiyab) por parte de las mujeres. Mahsa, de origen kurdo, salió el 13 de septiembre de 2022 de su casa en Saghez y fue arrestada por llevar el velo de manera incorrecta. Su muerte produjo movilizaciones sociales en gran parte del país y manifestaciones en varios países y ciudades del mundo, encabezadas por mujeres y jóvenes para oponerse a toda forma de la violencia.
Lo medular de la sugerente propuesta escénica de Enredo Teatro es la historia sobre las niñas y mujeres en Irán y la ‘invención’ de la resistencia. Marji, su amiga y su tía se preguntan por lo propio y la justicia, desconocida por la insensibilidad del gobierno actual, junto a la intromisión cultural e incluso militar de occidente. Marji ‘habla’ con Dios. Es el hilo directo con la divinidad que produce pensamiento. También tiene largas charlas con su tía Mali y su mejor amiga sobre las ‘responsabilidades revolucionarias’. En esa noción de responsabilidad se fundamenta la resistencia que va más allá de las exigencias divinas. Porque han sido la guerra, las continuas restricciones, la persecución a las mujeres las que han generado la responsabilidad absoluta: hacerse cargo, a sus diez años, de las injusticias de su país. Pero lee un libro que le obsequiara su tía, ‘Marx para niños’, que tiene dibujos y puede cantar la Internacional levantando el puño mientras se pregunta sobre la incompatibilidad entre la injusticia y la existencia humana.
Hay que enfrentarse al mal, resistiendo. Y la resistencia también tiene formas porque ahora ya no hay lugares neutros. Esas formas son los juegos infantiles de Marji que se cumplen en medio de la guerra, de las manifestaciones públicas o a través de la historia tangible del deseo infantil, que es el de todos los días. Son las microresistencias como pequeños dispositivos que se configuran por medio de la integración de los individuos (mujeres y hombres) y de sus experiencias fraternales, porque ‘la resistencia va a durar hasta que el corazón aguante’ hasta alcanzar, por fin, el mundo que todos aspiran.
El espectáculo cierra el alegato a favor de la paz, con testimonios visuales recogidos de varios lugares del mundo que condenaron la muerte de Mahsa Amini y la letra emblemática de Vivir Quintana de Canción Sin miedo, entonada por las actrices/personajes, que ha sido como un himno para señalar los excesos de los Estados machistas y patriarcales contra las niñas y las mujeres. “Si tocan a una respondemos todas”. Y este estribillo nos obliga a mirar casa adentro la genealogía de la violencia de una sociedad masculinizada y asimétrica que rechaza la igualdad plena.
Ficha técnica
Grupo: Enredo Teatro
Creación colectiva y actuación: Ana Paula Peña y Ana Nájera Erráez
Asistencia de dirección: Claudia Roggiero
Técnica: Camila Aulestia Calero
Diseño: Fernando Sarmiento
Diseño de iluminación: Pablo López
Fotografía: Marcelo Echeverría Morán
Lugar: Patio de Comedias / Temporada marzo 2023