OTRAS MIRADAS | La Mirada Bufonesca de La Pérfida | Sebastián Cattán
Este feriado de semana santa se presentó La Pérfida en el Patio de Comedias, lo que en cierto modo es un guiño cómico al tradicional curuchupismo de las fechas. Empecemos por contarle al lector que La Pérfida es una obra de teatro en clave de bufón dirigida por Silvia Brito, creada y actuada por Alejandra Ponce y la co-creación y dirección de arte de Paloma Pierini, que ronda los teatros y café de la ciudad de Quito. Una obra que trae de vuelta un territorio teatral que en los 90's (tal vez por el clima grunge de la década) tuvo una acogida fuerte por parte de algunos teatreros ecuatorianos. El bufón de Lecoq llegó y encontró un diálogo concreto con las necesidades de la época; de la mano de los Cronopios pudimos echar un vistazo al mundo bufonesco. La crítica a la sociedad y su forma de realizarla, resonaron en Quito y se sintió una presencia nueva en los escenarios. Sin embargo, esa fuerza violenta y crítica se ha ido diluyendo a medida que lo "políticamente correcto" se apodera de Ecuador y del mundo.
Pérfida. Alejandra Ponce
Es por eso que hace sentido y tiene un enorme valor la aparición de La Pérfida; un personaje irreverente que dentro de su estética gótica-pop llega para sacudir a una sociedad empolvada. Este polvo que nos envuelve no es muy distinto al de los 90's, solo ha cambiado de fachada. Pero el bufón es pillo para distinguir los lugares de poder y con su sátira: opinarlos. La Pérfida se deja ver como un personaje ágil en su mirada. La apariencia, la red social, la violencia gratuita, el género como lugar de poder y los mandatos sociales, son el terreno a opinar; y el trabajo de Alejandra Ponce, indiscutiblemente, lo hace. Se toma el tiempo de pasear y hacernos pasear, en una suerte de varieté oscura, un espejo que nos hace ver la sociedad distorsionada, un reflejo del cual formamos parte. A esto sumarle una comicidad genuina que parece mezclar el humor de Los Monsters con una crítica afilada que se lleva por encima desde al patriarcado hasta lo psicótico de las redes sociales.
Pérfida. Alejandra Ponce
La Pérfida no es pérfida de sí misma, es pérfida de la sociedad que la quiere atrapar, formatear y hacer funcional. Pero como buena bufona es hábil para el escape e intuye que el camino, sea cual sea, la debe llevar lejos de los lugares que ejercen poder. El camino de lo auténtico le pertenece al bufón y este no se detendrá hasta romper el molde, pues sabe que ahí atrás le espera su versión más real.
Pérfida. Alejandra Ponce
La obra tiene una gran cantidad de aciertos, la mayoría se sostiene en la calidad actoral de Alejandra Ponce que deja ver la cantidad de tiempo y entrenamiento que tiene en su haber. Una actriz con una disponibilidad física evidente que hace uso de los conocimientos adquiridos en su trayectoria, sin discriminar y poniéndolos a favor del juego escénico. Así logra crear un mundo que le pertenece y que genera la curiosidad en el espectador como para querer entrar. Al final del segundo acto, por dar un contexto de donde está la curva dramática para ese entonces, ocurre sin duda, la joya de la obra: La Polilla. Se trata de una escena poética y sensible que tridimensiona el mundo y genera lo que puede ser esencialmente el momento más bufonesco por cómo rompe con lo predecible del montaje. Luego de esta escena la obra toma otro color y deja ver su contramáscara, suelta, un poco, lo punzante de la crítica para dejar ver su mensaje, su punto de vista propio y positivo con el que cierra la obra como quien pone una bandera tras haber conquistado algo con gran esfuerzo. A mi parecer, incluso saliéndose un poco del territorio del bufón, lo que no molesta y se deja sentir como un riesgo honesto por parte de las creadoras.
Pérfida. Alejandra Ponce
Si algo podríamos pedir a la actriz es cierta calma acompañada de continuidad dramática en los inicios de la obra, en los que se la ve recién abordando el mundo para contrarrestar lo explicativo y quizás por esa razón un poco explicativa. La dirección de arte también merece una mención especial, pues acepta y potencia ese cruce entre lo pop de la dramaturgia y lo gótico del mundo del que parece haber salido este personaje. Un espacio cuidado y elegido donde tal vez 1 o 2 objetos aún puedan acercarse más al universo de la obra. La única mini desazón que me llevo es el objeto de la fosforera qué se siente sin elección, lejano al mundo, como si no hubiese decisión estética. La dirección escénica es buena y enmarca bien a la actriz. Es de rescatar cómo se nota que la directora pone el trabajo de la actriz por delante de la puesta, no se esconde en efectos ni en decorados, usa los recursos que tiene dramáticamente y con juego. La puesta de luces es versátil y suma cada vez.
Pérfida. Alejandra Ponce
Encuentro oportuno y conveniente profundizar los siguientes aspectos de la obra:
- El inicio ya se nos muestra deformado y con las rupturas propias del mundo "avanzado" del bufón, pero deja ligeramente de lado el gancho técnico que propone brindarnos algunas reglas aún más cercanas al espectador y así engancharnos en la trampa del bufón. Para luego sí, ya sujetos del todo, deformarnos a su gusto hasta exprimirnos.
- El tránsito entre una escena y la otra, si bien el personaje dialoga cómodamente con el mundo casi de varieté, hay momentos se hacen demasiado largos y cortan algo en el público, atentando a la acumulación sensible con una distracción que nos saca de la teatralidad.
- La máquina de humo, que al estar muy cerca del espectador, por momentos, genera una molestia. No esa molestia bufonesca, sino una que nos desconecta.
- El sonido podría pulirse. El modo en que atacan los ingresos y las salidas de las pistas perjudican lo escénico. Si bien el bufón es un terreno que puede con esas asperezas, ese detalle mejoraría la puesta.
Por demás está decir que es un trabajo muy recomendable, y muy disfrutable de ver. Tiene un toque underground que hace que el fin de semana se sienta vital y busca una profundidad en la reflexión que se agradece.
Ficha técnica
Dirección: Silvia Brito
Co-creación: Paloma Pierini
Actuación y creación: Alejandra Ponce Vargas
Patio de comedia
Abril 2025