“LOS FESTIVALES EN EL ECUADOR HAN SIDO SOSTENIDOS POR INICIATIVA INDEPENDIENTE”: SANTIAGO RIBADENEIRA. Jaime Flores Meza

Fuente: https://conexionnortesur.com/

“Yo quiero entender este festival desde los espectadores. Que es, me parece, lo que valida el proyecto. Si veo todos los días la sala llena eso me remite a una comprensión del hecho mucho más significativa. Y trato de percibir lo que el espectador, a su vez, está recibiendo y procesando”, dice Santiago Ribadeneira Aguirre, uno de los más importantes críticos de artes escénicas del Ecuador y director de la revista El Apuntador, en la charla que sostenemos a propósito del decimoctavo Festival Internacional de Artes Escénicas Escenarios del Mundo (EDM), realizado entre el 2 y el 14 de octubre de 2024 en Cuenca.

“La gente asume las temáticas y la variedad de formatos y propuestas, se apropia de todo eso: circo, comedia, obras más complicadas y densas como Búho, o la versión que hace Deus Ex Machina con La doble y única mujer, ese texto de Pablo Palacio, una propuesta muy interesante… O Sacha Wasi, que tiene una particularidad para poder contar una historia sin tantas palabras, sino más bien con manipulación de objetos… Todas son estéticas interesantes. Por eso digo que los espectadores son capaces de procesar lo que se les está entregando. La prueba es su asistencia sostenida todos los años”.

Santiago Ribadeneira. Foto Archivo El Apuntador

En efecto, el festival logró reunir una multiplicidad de géneros, formatos y propuestas: danza teatro, comedia, drama, circo, teatro de objetos, acrobacia, clown, musical, mimo, performance. En esta edición el país invitado de honor fue España, que trajo tres espectáculos. Pink Unicorns, Búho y You say tomato. Búho, de la compañía catalana Titzina Teatro, fue una de las experiencias más impactantes de todo el festival por su fuerza dramatúrgica, actoral, visual y sonora. “Es una obra muy cuidada visualmente sobre las profundidades de la memoria y la búsqueda del yo”, se lee en el catálogo oficial del festival. “El prestigioso grupo catalán trabaja con varios estilos y recursos escénicos y gestuales, para abordar el misterio de las facultades cognitivas y la salud mental. Tras una investigación exhaustiva durante la que descendió a un mundo subterráneo de cuevas descubiertas en Madrid y Barcelona, narra la historia fascinante de Pablo, un antropólogo que sufre un accidente cerebral” (p. 4).

Escena de Búho. Festival Internacional de Artes Escénicas Escenarios del Mundo. Foto: Silvia Echevarria. El Apuntador

La doble y única mujer es un montaje de la compañía ecuatoriana Deus Ex Machina que propone una versión libre del cuento homónimo del escritor ecuatoriano Pablo Palacio (1906–1947), mezclando géneros como el musical y el teatro dramático, por algo se define como “un musical dramático quiteño que parte del texto del icónico escritor”, como se presenta en el catálogo (p. 5). Se aclara que los personajes han sido “reelaborados” y que el “planteamiento temático” no es “necesariamente idéntico al planteado por el autor”.

Escena de La doble y única mujer. Festival Internacional de Artes Escénicas Escenarios del Mundo. Foto: Silvia Echevarria. El Apuntador

Otro montaje cautivante fue Pareidolia, juegos para activar la imaginación, de la compañía chilena La Llave Maestra. Con un trabajo corporal y objetual de una destreza superlativa, los actores del grupo crean monstruos y seres fantásticos, aves, vestimentas que cobran vida, manos que se transfiguran en otros seres, logrando justamente eso que anuncian: activar la imaginación del espectador mediante algo tan propio del ser humano y del teatro como es el juego. Para que no dejemos de soñar en la vigilia.

Escena de Pareidolia. Festival Internacional de Artes Escénicas Escenarios del MundoFoto: Silvia Echevarria. El Apuntador

Los regalos es la propuesta que trajo al festival la compañía peruana Teatro Físico. Mediante técnicas de mimo, máscaras y animación visual los tres actores representan una familia masculina, sin madre ni hermanas, en la que los problemas de comunicación, aislamiento, violencia y tareas domésticas son constantes. El dramatismo de la música hace un contrapunto con la dificultad que tienen los personajes de realizar actividades cotidianas, como la compra y uso de unos zapatos. Lo jocoso se vuelve un hecho doloroso y patético. O, si se quiere, tragicómico. De ahí que resulte acertado describir la obra en los términos enunciados en el catálogo: “Desde la expresividad gestual, el mimo corporal dramático se cuenta esta historia dulce frente a dificultades masculinas y el hábito de violencia” (p. 10).

Los festivales ecuatorianos fundacionales

En su crónica “Los festivales como espacios de articulación” (2022), Santiago Ribadeneira dice:

“Hasta 1988, en el Ecuador, los festivales y encuentros de teatro fueron esporádicos. Algunos intentos oficiales por convocar a eventos nacionales tuvieron acciones casuales, sin continuidad ni persistencia. Muy atrás había quedado el Primer Festival Latinoamericano de Teatro, que se realizó en 1972 (pensado y promovido por Ilonka Vargas) para convocar a grupos, directores y creadores del continente, siguiendo esquemas de otros encuentros de clara tendencia progresista o de izquierda. Se produce un largo interregno que, sin embargo, es propicio para el aparecimiento de espacios como la Asociación de Trabajadores de Teatro, la Escuela de Teatro de la Universidad Central del Ecuador, la revista La Última Rueda, el Proyecto de Difusión Cultural del Banco Central del Ecuador, etc.”

En 1974 se creó, efectivamente, la Escuela de Teatro de la Universidad Central en Quito, la primera y por muchos años única escuela teatral universitaria en el país, a la que Ribadeneira se vinculó como docente y coordinador académico durante 25 años. No obstante, fue en la costera ciudad de Manta donde nació el festival más antiguo del país: el Festival Internacional de Teatro de Manta, que en 2024 llegó a su edición número 37 (del 6 al 12 de octubre). Organizado desde su inicio en 1988 por el grupo de teatro La Trinchera, con recursos de la empresa privada, se ha mantenido contra viento y marea.

En 1997 surgió el Festival Internacional de Artes Escénicas de Guayaquil (Fiartes-G), que este año arribará a su edición 27. Jorge Parra Landázuri es su director artístico. Así lo destaca Ribadeneira: “De alguna manera, en el sentido de la continuidad y del sostenimiento del teatro y la danza, habría que destacar, de manera especial, el trabajo que viene desarrollando Zona Escena (organización de gestión independiente, dedicada a la creación, formación, investigación, difusión y programación de las artes escénicas en Guayaquil) con Jorge Parra, bailarín, coreógrafo y promotor cultural, en el terreno particular de los festivales”.

Parra afirma que el festival “ha construido un público creciente, diversificado y cómplice, fomentando el intercambio, entre países, ha ampliado su radio de acción a toda América Latina, el Caribe y parte de Europa a través de redes y circuitos internacionales, que permiten la circulación de espectáculos de positiva y comentada factura, así mismo, ocupa la mayoría de los espacios escénicos e importantes plazas públicas de la ciudad” (citado en Ribadeneira, 2022).

Ribadeneira resalta otro certamen importante que organiza Zona Escena en Guayaquil, Fragmentos de Junio: “El evento es un encuentro dedicado a la danza que aparece por primera vez en 1993, tras una huelga laboral en la Casa de la Cultura del Guayas, y que permite a los artistas de la danza, que entonces participaban de la Escuela de Ballet a cargo de Jorge Parra Landázuri, organizar un encuentro artístico espontáneo, como medida de activación y difusión. En el año 2003 se logra concretar la segunda edición”. Desde entonces se mantiene ininterrumpidamente. “Fragmentos de Junio es la cita internacional para lo más distintivo del arte danzario nacional e internacional que llega a los múltiples escenarios de la ciudad”, puntualiza Ribadeneira.

Después de valiosas experiencias como la del Festival Internacional Experimental de Quito, la capital del país sigue contando con certámenes escénicos varios. “Fue una propuesta de Carmen Rosa Ponce, exdirectora de Educación y Cultura del Municipio de Quito, quien en 1999 le ofreció a Rossana Iturralde, actriz y productora de teatro, dirigir el Festival Internacional Experimental de Quito, Fite-Q, en condiciones económicas muy complicadas”, señala Ribadeneira. “El Festival fue una iniciativa de la Corporación Tragaluz, que seleccionaba los grupos internacionales, definía el perfil del festival y presentaba el proyecto a los patrocinadores para su aprobación. Algunos sectores opinaban que, el Fite-Q se convirtió en un ‘magno evento’, con un presupuesto ostentoso o desproporcionado para la realidad del país y de la ciudad, que sin embargo, se volvió un referente significativo a la hora de evaluar las incidencias que tienen los festivales y encuentros de teatro que se realizaban en el Ecuador”.

Ribadeneira también resalta la realización del festival Tiempos de Mujer: “En marzo de 2004 se organizó la Primera Muestra de Mujeres en Escena, Tiempos de Mujer. Cinco actrices y directoras escénicas profesionales, integrantes fundadoras del Movimiento Teatral Contemporáneo Quintaescena de Quito, sumaron esfuerzos para fraguar colectivamente un espacio que recoja y proyecte el trabajo de la mujer creadora, a través de la presentación de cada uno de los espectáculos teatrales unipersonales”.

Por otra parte, desde 2015 la Fundación Teatro Nacional Sucre viene presentando anualmente el Festival Internacional Fiesta Escénica de Quito (FIEQ). En la página del festival Gabriela Ponce Padilla (2024), Directora Artística Ejecutiva de esta fundación, dice:

“Programar hoy un festival de artes escénicas implica escuchar la particularidad de cómo esa pregunta por lo escénico orienta y da sentido a las investigaciones de los creadores. Atender los movimientos más sutiles o más explícitos de un impulso que desafía y reconfigura los mapas de nuestro quehacer crea una paradoja entre la convención y lo que se renueva; y se plantea la tensión en la que ubicamos los ejes de nuestra curaduría: cruces, atravesamientos, ambivalencias entre la escena y lo real; entre la ficción y las historias de vida; entre las disciplinas y sus límites; entre los modos de producción y los territorios que esas prácticas redistribuyen”.

En cuanto al teatro de muñecos, Santiago Ribadeneira destaca el Festival Internacional de Títeres Con Bombos y Platillos, que se presenta en Quito desde 2001, señalando que es otra mujer quien lo organiza, Yolanda Navas, de la Fundación Titerefué. “Es un acontecimiento de dimensiones importantes, demuestra una calidad de gestión que se ha convertido en el distintivo del encuentro, con innovaciones permanentes en el ámbito de la convocatoria y también de la cobertura”.

El mencionado Festival Escenarios del Mundo, de Cuenca, es un evento independiente que organiza el actor y promotor cultural Juan Andrade Polo desde 2006 a través de Faquir Producciones. En el catálogo de la XVIII edición que acaba de concluir, la organización manifiesta:

“Proponemos un festival que sea poderoso, significativo y representativo del quehacer escénico actual; que dialogue con las realidades sociales y con las necesidades ciudadanas; las de índole estético recreativo, sí, pero entendiendo que estas se expanden a las inquietudes existenciales y vitales del ser, trascendiendo lo exclusivamente material e inmediato para encontrar sentido y belleza en nuestra cotidianidad y paso por la vida. La propuesta la hacemos, desde hace 18 años, juntando una suma de fuerzas: las creativas, investigativas, entregadas y poseídas —quizá— de los artistas presentes que han tenido logros en Ecuador y en sus países de origen en este tiempo, que han incidido en sus escenarios respectivos, generando crítica, aplausos, emociones y conmociones, y que han gravitado entre los públicos. Por otro lado, las fuerzas institucionales o empresariales que se siguen comprometiendo con la identidad nuestra vinculada a la cultura. Y, además de ellas, las del equipo técnico-logístico que convoca y articula a las demás para que tenga lugar, con todo a punto, ese momento mágico y efímero de la escena. Finalmente, está el poder del público, razón de ser de este proceso, pues el hecho escénico se completa solamente en el encuentro con la audiencia”. (p. 3)

Escena de Búho. Foto: Silvia Echevarria. El Apuntador

Por último, en esta apretada síntesis, mencionamos el Festival Internacional de Artes Vivas de Loja (FIAVL), de carácter estatal, creado en 2016 en la ciudad de Loja, al sur del país. Sobre este acontecimiento anual Ribadeneira afirma, entre otras cosas: “si hay un ‘agente’ que ahora mismo sostiene al FIAVL es las nociones de espacio y lugar junto a la representación de grupos nacionales e internacionales; el Camino a Loja que se anticipa al evento y la concurrencia diaria de los habitantes de la ciudad y la provincia, que asumen el desafío del disfrute con absoluta independencia y autonomía. Esa línea de acción, supone además, la recuperación de lo político para la cultura y el arte, y de lo público para la expansión y la participación ciudadanas”.

Escenografía, vestuarios y máscaras del montaje de Edipo Rey por la compañía colombiana Ensamblaje Teatro. Festival Internacional de Artes Vivas de Loja, 2017. Foto: Jaime Flórez Meza

Una reflexión final

Como se puede notar, las artes escénicas en el Ecuador han encontrado en estos festivales emblemáticos otro importante espacio de socialización, aprendizaje, expresión, difusión, circulación y reflexión de lo que son las amplias y diversas prácticas artísticas escénicas, además de establecer un puente y un diálogo con estéticas internacionales. La creación y consolidación de públicos es fundamental en estos procesos. Ello se evidencia en la fidelidad que mantienen las audiencias a pesar de las crisis sociales, económicas y políticas que atraviesa el país. En medio de los apagones eléctricos que ahora sufre el Ecuador la respuesta del público alumbra los escenarios con su constante presencia.

Referencias

Catálogo oficial 18° Festival Internacional de Artes Escénicas Escenarios del Mundo (2024). https://escenariosdelmundo.com/

Ponce Padilla, Gabriela (2024). Fiesta Escénica 2024: Escenarios del Sur, Escenarios en Expansión. https://teatrosucre.com/fiesta-escenica-2024-escenarios-del-sur-escenarios-en-expansion/

Ribadeneira Aguirre, Santiago (2022). Una crónica interpuesta. Los festivales como espacios de articulación. Las temporalidades del Teatro Ecuatoriano. La entrada del nuevo milenio. Genoveva Mora Toral (editora).